Cómo nacen las tortugas marinas

Cómo nacen las tortugas marinas

Las tortugas marinas son unos de los animales que más suelen gustar a las personas. No solamente las tenemos en alta estima por ser animales bellos, sino que a nivel ambiental juegan importantes roles en los ecosistemas. También son verdaderas reliquias de la evolución, pues se estima que desde hace unos 200 millones de años no han cambiado mucho.

Lamentablemente, varias especies de tortugas marinas se encuentran en peligro de extinción, por lo que es esencial que conozcamos más sobre estos animales. Por ejemplo, en el mar Mediterráneo pueden encontrarse 4 de las 7 especies de tortugas marinas, siendo un hot spot de biodiversidad. Por ello, podemos considerar que hay una gran responsabilidad de nuestra parte para mantenerlas seguras. En este artículo de EcologíaVerde te explicaremos en detalle cómo nacen las tortugas marinas. También explicamos qué no debemos hacer durante el proceso del nacimiento de las tortugas marinas y cómo sí podemos ayudarlas.

Cómo es el nido de las tortugas marinas

Las tortugas pasan toda su vida en el mar y solamente vuelven a tierra las hembras cuando es tiempo de desovar. Ellas son de comportamiento migratorio, el cual está estrechamente relacionado con esta puesta de huevos en las costas.

Las tortugas hembras regresan a anidar al mismo sitio donde nacieron para que llegue la nueva generación de tortugas ahora a su cargo. A este proceso se le conoce como arribadas y ocurre cuando las hembras sincronizan su anidación. Este momento suele ser todo un espectáculo, pues llegan docenas de hembras al mismo tiempo.

Por otro lado, los machos no se involucran durante la construcción del nido. Los nidos son construidos en la playa solo por las hembras, buscando siempre que sea un sitio seguro. Los sitios de puesta ocurren en zonas templadas y subtropicales y, además, este proceso de puesta de huevos lo hacen en la noche cuando hay menos depredadores.

Para construirlo usan sus patas traseras para cavar en la arena y crear un hoyo de aproximadamente 60 cm de profundidad en el que colocarán sus huevos. Estos no son duros, sino que son blandos para evitar que se rompan durante la caída desde el cuerpo de la hembra.

Una vez puestos los huevos vuelven a tapar el agujero con arena, asegurándose de cubrirlos bien. En este hoyo se conservará el calor del sol y se mantendrá entre todos los huevos para que puedan incubarse y desarrollarse. La temperatura ambiental juega un importante papel en el sexo de las tortugas. Si hace mucho calor serán hembras y si está templado serán machos.

No está permitido que los humanos se acerquen durante el proceso, porque pueden alterar a la hembra y detener la puesta de huevos o desencadenar otros problemas.

Puede resultarte interesante conocer más sobre Qué son los animales ovíparos leyendo este artículo.

Cómo salen de los huevos las crías de las tortugas marinas

60 días después de que la hembra haya puesto los huevos, se rompen y sale una tortuga de cada huevo (en algunos casos aislados pueden salir dos de un huevo). La eclosión de los huevos se da, principalmente, al atardecer o al amanecer para evitar que el sol haga estragos en ellas.

Cada tortuga rompe su huevo con su pico, ya que en la punta de la boca tienen una parte dura, y a la que una empieza las demás no tardan mucho en empezar también.

Te recomendamos leer este otro artículo acerca de Cuántos huevos ponen las tortugas marinas.

Cómo salen de los nidos las crías de las tortugas marinas

Las tortugas esperan a que todos los huevos del nido eclosionen para emprender su camino hacia el agua juntas. Ellas siguen tapadas por la arena y necesitan cavar su camino hacia fuera.

El camino del nido al mar es muy agotador para las pequeñas tortugas marinas. Su organismo está adaptado al medio marino, no al terrestre, y si le sumamos que acaban de nacer, podremos imaginarnos el esfuerzo que para ellas implica.

Para salir del nido se empujan con sus patas en forma de aleta para caminar desde la costa hasta tocar el agua que las lleve hacia el mar y empezar a nadar. Se apoyan unas en otras para subir a la superficie de la arena y sobre los montones de arena que van provocando al ascender.

Todavía tienen residuos de vitelo pegadas a ellas, lo que hace que floten. A los tres días ya pueden sumergirse sin problemas. En esta etapa se mantienen sujetas a corrientes marinas y giros océanos. Muchas suelen resguardarse en bosques de sargazos para refugiarse y alimentarse en lo que toman más tamaño.

Qué comen las tortugas marinas al nacer

Los huevos de las tortugas marinas tienen particularmente mucho vitelo y este es consumido en gran medida durante el desarrollo embrionario. Cuando la tortuga está por nacer, el vitelo antes rico en proteínas tiene ahora un alto contenido de lípidos y azúcares. Cuando recién nacen y salen del huevo comen el vitelo para tener energía para las actividades de los primeros días del nacimiento, que implican salir del nido y llegar hasta el mar y mantenerse a flote. Esta reserva de comida dura solamente una semana y cuando se acaba ya deben tener otra fuente de alimento.

Cuando llegan al mar, su alimentación es omnívora y se alimentan de pequeñas partículas suspendidas en el agua. Pueden comer:

  • Plancton.
  • Algas.
  • Larvas de copépodos.
  • Cnidarios.
  • Moluscos.
  • Huevos de otros animales.
  • Pequeños invertebrados.

Conforme van creciendo, van adaptando su tipo de alimentación que es particular para cada especie. Puede haberlas carnívoras, omnívoras o herbívoras. Puedes conocer más sobre este tema leyendo este otro post sobre Qué comen las tortugas marinas.

Supervivencia de las crías de las tortugas marinas

Las tortugas marinas ponen entre 100 y 250 huevos por nido, pero no todos sobrevivirán. Ellas tienen una estrategia reproductiva tipo r, que implica que tendrán muchísimas crías para compensar el que muchas se perderán. Esto es común en hábitats inestables, como lo es el mar. No hay cuidado parental, ni de la madre ni del padre. Acompañan el alto número de huevos con múltiples puestas por estación.

Solamente el 10% de las crías de tortugas marinas llegarán a ser adultas, principalmente debido al alto número de amenazas a las que se enfrentan al salir del huevo. La pérdida comienza desde el nido, donde no todas llegan a desarrollarse bien y muchos depredadores pueden consumir los huevos. Otra parte se pierde durante el trayecto al mar y son devoradas por otros animales, como perros, zorros, aves, cangrejos o incluso humanos. Estos animales suelen merodear los nidos en espera de su oportunidad. Además, algunas tortugas pueden llegar a engancharse en vegetación o basura y no llegar al agua. También en zonas con poblaciones humanas densas o turismo muy desarrollado, las tortugas recién nacidas pueden sentirse atraídas por las luces artificiales nocturnas, y es muy común encontrarla atropelladas en carreteras a causa de su desorientación por contaminación lumínica.

Ahora bien, las tortugas que llegan a la edad adulta son muy longevas y pueden llegar a vivir más de 100 años. Aquí puedes leer sobre Qué animales viven más años.

Cómo se puede ayudar a nacer a las tortugas marinas

Seguramente estas amenazas te llevarán a pensar que es necesario intervenir para que la tasa de supervivencia sea más alta, pero la realidad es que cualquier acción que no sea mediada por profesionales en el campo de las tortugas marinas puede causar más daño que beneficio.

Sabemos que tus intenciones son buenas, pero te recomendamos no interferir llevando a las tortugas al agua, abriendo el nido ni llevándote los huevos para incubarlos en casa, pues podrían morir.

Por ejemplo, en caso de que llegues a ver en las costas del mar Mediterráneo tortugas marinas anidando, o que te encuentres con un nido en playas de mucha afluencia, lo mejor que puedes hacer por ellas es avisar a las autoridades y que contacten a fundaciones y organizaciones dedicadas a las tortugas, como la Fundación CRAM (Conservación y Recuperación de Animales Marinos) ubicada en Barcelona. Recuerda que la conservación de estos animales depende en gran medida del correcto manejo con los conocimientos e instrumentos puntuales.

Adicionalmente te recomendamos reducir tu consumo de plásticos de un solo uso, no consumir huevos de tortuga y tener un uso responsable de los recursos naturales para que las comunidades de tortugas marinas no peligren por la intensa actividad de los humanos. Por supuesto, también puedes ayudar a fundaciones como la Fundación CRAM. Para tener más detalles, puedes entrar en su web y leer sobre Cómo ayudar a la Fundación CRAM.

Ahora que ya conoces cómo nacen las tortugas marinas, te recomendamos aprender sobre las distintas especies como, por ejemplo, las Tortugas del Mediterráneo.

Si deseas leer más artículos parecidos a Cómo nacen las tortugas marinas, te recomendamos que entres en nuestra categoría de Curiosidades de los animales.

Bibliografía
  • Eckert, K. L., K. A. Bjorndal, F. A. Abreu, Grobois y M. Donnelly (Editores). (2000) Traducción al español. Técnicas de Investigación y Manejo para la Conservación de las Tortugas Marinas. Grupo Especialista en Tortugas Marinas UICN/CSE Publicación No. 4.
  • Alberto, A. C. M. (1991). Determinación bacteriológica de los principales agentes que influyen en la mortalidad embrionaria en el huevo de tortuga golfina (Lepidochelys olivacea). Disponible en: http://repositorio.cucba.udg.mx:8080/xmlui/bitstream/handle/123456789/3790/Nevarez_Torres_Eduardo.pdf?sequence=1
  • Márquez, R.(1996) Las tortugas marinas y nuestro tiempo. México: SEP; FCE; CONACYT, La Ciencia para Todos; 144.
  • Camiñas, J. A. (2002). Estatus y conservación de las tortugas marinas en España. Atlas y libro rojo de los anfibios y reptiles de España. Dirección General de Conservación de la Naturaleza-AHE, Madrid, 385-420.