Cuando hablamos de los jazmines no referimos en realidad a todo un género de plantas con más de 200 especies, el Jasminum. Se trata de plantas ornamentales de tipo arbustivo o trepador, muy populares por sus bonitas flores, que en muchas especies son además de agradable y característica fragancia. El jazmín es conocido por ser una planta que precisa de grandes cantidades de luz, pero es posible tener a algunas especies en interior con los cuidados adecuados. Una de las especies más habituales para tener una planta de jazmín en maceta es el Jasminum Polyanthum, que resulta particularmente aromática durante la noche.
Si quieres aprender más sobre cómo cuidar tu jazmín en maceta, continua leyendo este artículo de EcologíaVerde en el que hablamos sobre los cuidados del jazmín en maceta y cómo podarlo.
Cómo cuidar un jazmín en maceta - cuidados básicos
Estos son los cuidados básicos de un jazmín en maceta:
- Luz: el jazmín necesita de mucha luz, incluso en interior. Ponlo junto a una ventana o en un balcón.
- Sustrato: es necesario que el sustrato ofrezca muy buen drenaje y una buena cantidad de nutrientes.
- Temperatura: si quieres que florezca cada año, debes ubicarlo en algún punto por debajo de los 10 ºC en invierno.
- Abono: en la temporada cálida, será bueno aplicarle fertilizante una vez al mes.
- Riego: necesita que su sustrato se mantenga húmedo casi siempre, aunque nunca encharcado.
Además de conocer los cuidados del jazmín en maceta, te recomendamos esta guía sobre 9 tipos de jazmín para que encuentres el que más te gusta.
Clima, luz y ubicación
La luz es el primer punto a mencionar y también el más importante cuando hablamos de jazmines. Estas plantas son conocidas por necesitar de una exposición directa a unas 4 horas de luz al día.
Teniendo esto en cuenta, necesitarás ubicar el jazmín en maceta en un lugar en que reciba una gran cantidad de luz, a poder ser junto a una ventana o incluso fuera, en un balcón o terraza, en los meses cálidos. Además, la planta crecerá más sana y vigorosa si está en algún lugar aireado, con circulación de aire que le ayude a mantener unos niveles adecuados de humedad, lo que resultará en la producción de flores grandes y fragantes.
En lo que se refiere al clima en los meses fríos, si la planta pasa el invierno expuesta a temperaturas estables por encima de los 10 ºC es probable que no produzca flores en la siguiente temporada cálida, ya que no habrá entrado en su periodo de reposo vegetativo. Para que esto no ocurra, será necesario sacarla afuera durante el invierno, pero en algún lugar protegido de las heladas, que podrían llegar a matar al jazmín. En cuanto llegue la primavera, vuelve a meterla en casa si quieres, pero hazlo sobre todo si el lugar en el que está tiene una incidencia de sol fuerte por muchas horas.
Jazmín en maceta: sustrato
En el punto del sustrato y el recipiente es indispensable que la maceta cuente con agujeros de drenaje, ya que el jazmín necesitará de riegos frecuentes y no tolera el encharcamiento en su sustrato.
Prepara una base de grava y guijarros de tamaño medio en el fondo de la maceta para que los agujeros de drenaje no se obstruyan ni la tierra se escape por ellos, y luego añade un sustrato ligero con muy buen drenaje. Nosotros recomendamos una mezcla con una parte de turba, una parte de fibra de coco y una parte de humus de lombriz, lo que resulta en una mezcla muy rica en nutrientes y con una buena capacidad de no encharcarse. Si precisas de una mayor capacidad de liberación de agua, puedes añadir algo de arena a la mezcla.
Jazmín en maceta: riego
El jazmín requiere de tener el suelo o sustrato casi permanentemente húmedo, pero no encharcado, en los meses cálidos. Es mejor regar con una frecuencia alta y en menor cantidad, y si la maceta tiene un plato debajo, asegúrate de retirar el agua sobrante unos 10 o 15 minutos después de haberla regado. En invierno deberás reducir mucho el riego, a una vez a la semana o cada quince días.
Jazmín en maceta: abono
Si usas una buena cantidad de humus de lombriz en la base del sustrato ya habrás aportado una buena cantidad de nutrientes a la planta. Sin embargo, en los meses cálidos conviene darle un aporte extra de forma mensual. Puedes recurrir a fertilizante y abono específico, o preparar un abono orgánico casero con piel de plátano o cenizas vegetales, que resultan muy ricos en potasio.
En estos otros artículos te explicamos Cómo hacer abono orgánico casero para plantas y Cómo hacer humus de lombriz.
Jazmín en maceta: hojas amarillas
Si a tu jazmín tiene las hojas amarillas lo más probable es que se deba a que estás regándolo demasiado, o a que el sustrato no ofrece suficiente drenaje. Si se da el caso, espacia los riegos o trasplántalo, preparando una mezcla con un mejor drenaje. También puede ocurrir que esté falto de nutrientes, lo que deberías suplir con abono para plantas de flor o con uno de los fertilizantes caseros ricos en potasio que pueden elaborarse.
En este otro post hablamos más sobre las Hojas amarillas en las plantas: por qué salen y soluciones.
Cómo podar un jazmín en maceta
La poda del jazmín en maceta es importante, ya que le dará a la planta la fuerza para volver a florecer la temporada siguiente. Se recomienda podar el jazmín en macera al final del invierno, después de las heladas y antes de que empiece la temporada de crecimiento. Sigue estos sencillos pasos para podar el jazmín en maceta:
- Asegúrate de desinfectar la herramienta de poda antes de usarla, y empieza por podar todos los tallos y ramas en mal estado o muertos.
- Sigue con los tallos que crecen hacia el interior estorbando a los otros nuevos de la planta, priorizando los enredos entre ellos.
- Corta también los que crezcan en direcciones no deseadas y aquellos que sean demasiado viejos para dar flores.
En este enlace verás una guía específica sobre Podar el jazmín: cuándo y cómo hacerlo. Además, en este vídeo verás esta guía sobre los cuidados del jazmín en maceta y algunos detalles más.
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