Hoy en día ya somos muchos los que estamos concienciados con la ecología y con la necesidad de reciclar al máximo los residuos que generamos. No obstante, nadie nace enseñado y muchas veces cometemos errores a la hora de reciclar o no tenemos claro en qué contenedor va cada resido. En EcologíaVerde queremos minimizar esas dudas todo lo posible, por eso en el siguiente artículo respondemos una de las dudas más comunes: ¿Los bricks van al cubo amarillo?
¿Los bricks van al cubo amarillo?
Los bricks o tetra-bricks son uno de los envases que más dudas generan cuando nos disponemos a reciclar. Si tenemos en cuenta que se usan para multitud de productos y que cada día se generan toneladas de residuos solo con los bricks, es muy importante ubicarlos bien para poder reciclarlos al máximo.
A menudo se dice que el amarillo es el contenedor para el plástico, algo que no es cierto. El amarillo es el contenedor destinado a los envases. Dado que los bricks son un envase, los bricks van al cubo amarillo. Aunque en un primer momento podemos creer que los bricks son de cartón, la realidad es que están recubiertos, tanto por dentro como por fuera, por una capa de plástico que les hacen impermeables.
Qué se tira en el contenedor amarillo
El contenedor amarillo está destinado al reciclaje de los envases plásticos que forman parte de nuestra vida diaria. Al reciclarlos permitimos que estos materiales puedan volverse a usar dándoles nuevas vidas, una manera perfecta para poder conservar el medio ambiente y reducir la explotación de nuestros recursos.
Dicho esto, debes tener en cuenta qué se tira en el contenedor amarillo:
- Las botellas de plástico, como las botellas de agua, detergente o refrescos.
- Envases de plástico, como los yogures o los envases de crema de cacao.
- El papel film con el que se envuelven ciertos alimentos para conservarlos.
- Las latas, ya sean de refrescos como de conservas.
- Las chapas de las botellas de vidrio.
Qué no se puede tirar en el contenedor amarillo
Como ya hemos explicado en apartados anteriores, el contenedor amarillo no es el contenedor del plástico o, mejor dicho, no es el contenedor de todos los plásticos. Te acabamos de explicar qué se tira en el contenedor amarillo, no obstante, tan o más importante son aquellas cosas que no debes tirar allí, ya sea por que no se pueden reciclar o por que se deben tirar en otros contenedores.
Como seguramente sabrás, en el contenedor verde tiramos el vidrio, en el azul el papel y el cartón, mientras que los residuos orgánicos van al contenedor marrón. Pero no todo lo que no entre en estas categorías irá al contenedor amarillo, lo que no debes tirar allí son:
- Los productos sanitarios como los guantes, los biberones o los pañales usados.
- Los juguetes, aunque estén hechos de plástico.
- Móviles o electrodomésticos aunque estén hechos de plástico.
- Las gafas viejas o las lentillas utilizadas.
- Los envases de plástico que han contenido productos tóxicos o potencialmente peligrosos como los medicamentos, los envases de pintura o de combustible.
- Las perchas de plástico ni de cualquier otro producto.
Cómo se recicla un tetrabrik
La realidad es que no hay un único método de reciclar los tetrabrick, sino que dependiendo de la planta de reciclaje pueden utilizar unos u otros. No obstante, así son los dos principales métodos cómo se recicla un tetrabrick:
- Agitación mecánica: suele ser el método más utilizado, se trata de poner los tetrabricks en unos grandes depósitos llenos de agua. A su vez, se agita este contenido de forma mecánica, haciendo que se separen los componentes del envase. Por un lado sale el cartón, que es más del 70% del brick, por otro lado el polietileno, que puede llegar a ser el 20%, finalmente el aluminio, que bordea el 5% del total del recipiente. Principalmente se recicla el cartón, que puede convertirse en papel Kraft, mientas que los otros no es tan habitual. Aún así, el polietileno puede usarse como combustible.
- Triturado y planchado: la otra forma de reciclaje que se utiliza para los tetrabricks es el triturada y la posterior extensión sobre planchas. Allí, tras calentarlo y prensarlo, se obtienen unas laminas muy parecidas a las de madera conglomerada.
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