Passiflora caerulea o flor de la pasión: cuidados

Antes de conocer cuáles son los cuidados de la flor de la pasión, es importante destacar sus características:

• Llega medir 2 metros de altura a los tres años de edad, y alcanza los 6 metros tras 20 años.
• Obtiene su nombre de pasionaria porque se ha atribuido un símbolo de la pasión de Cristo a cada una de las partes florales dada su complejidad. Estas son radiales y tienen coloraciones que van del azul a violeta, de aquí la especie caerulea que significa azul en latín.
• Se han desarrollado muchas variedades de P. caerulea para dar con diferentes colores. Por ejemplo, la variedad Constance Elliot da una flor completamente blanca, mientras que la variedad Pierre Pomié tiene la base de color rosa en lugar del clásico azul de esta especie.
• Los tallos producen zarcillos enrollados para sujetarse de otros árboles o de superficies de las que pudieran sujetarse para trepar. Descubre este artículo sobre las Plantas trepadoras.
• Es originaria de Sudamérica, específicamente del sur de Brasil y el norte de Argentina, pero fue llevada primero a Europa gracias a los exploradores españoles, y después se expandió por todo el mundo. Conoce la Flora y fauna de Brasil.
• Es una planta perenne que se da durante todo el año en climas tropicales, pero en climas templados es caducifolia para poder adaptarse a las condiciones. En estos climas fríos, sus flores pueden observarse desde mediados de verano hasta principios de otoño, mientras que se presentan todo el año en climas cálidos.
• Es pariente de la pasiflora que produce el fruto de maracuyá y de la pasiflora que da la granada china, por lo que veremos que esta también produce un fruto en cápsula naranja que si bien es comestible, tiene menos sabor que las mencionadas. De todos modos tiene aporte nutricional y hay que aprovecharlas si se tiene esta planta en casa.
• Además de ser una bella planta ornamental, puede usarse como planta medicinal por sus propiedades ansiolíticas, sedativas y contra el insomnio, además de tener propiedades diuréticas y para controlar problemas gastrointestinales como disentería. Para usarla de forma medicinal se usan las hojas en forma de infusión.

Te recomendamos este artículo donde podrás descubrir más Plantas tropicales de exterior.

Su clima predilecto es el cálido a tropical, pero también puede soportar el clima templado y resiste el frío bastante bien. La mayoría de las pasifloras que se cultivan en latitudes al norte están en invernaderos para mantenerlas en una temperatura cálida.

Durante fuertes inviernos siempre es preferible resguardarla cuando se acerca el invierno, con especial atención a las raíces para que no se quemen con el frío. Existe la posibilidad de que durante el frío pierda sus hojas. Para recuperarla se recomienda cortar muy cerca de la base para que le nazcan nuevos brotes.

Es una planta heliófila que requiere de grandes cantidades de luz directa. Para que pueda crecer bien, tiene que estar ubicada a pleno sol o en un sitio que sea muy luminoso y que reciba luz natural.

La flor de la pasión debe colocarse sobre un alambrado horizontal sobre el que se extenderá y donde se sostendrá con sus zarcillos. Cuando recién se planta pueden colocarse tutores para ayudarle a prenderse del alambrado.

Tienen un crecimiento rápido que ayudará a cubrir superficies. No se recomienda tener en interiores por su naturaleza de trepadora rápida. Lo mejor es tenerla en vallas en el jardín, o incluso en árboles muertos que le sirvan como soporte.

El suelo sobre el que se plantará la pasiflora no es muy exigente, pero se recomienda que contenga arcilla, esto para que se retenga la humedad.

La tierra debe mantenerse siempre húmeda, pero evitando el riego excesivo y encharcamiento. La frecuencia se controlará visualmente y agregando conforme sea necesaria. En verano debe regarse con más frecuencia que en invierno para compensar el agua perdida por evaporación con espaciado de riego cada 2 a 3 días.

Para impulsar el crecimiento de la planta puede abonarse durante la primavera y en otoño con abono para rosas, para arbustos o con un mantillo de hojas. No se recomienda abonar más de lo mencionado porque se promoverá el crecimiento de hojas en lugar del de flores.

En primavera se podan los brotes y ramas muertas. En lugares fríos, donde las heladas hayan maltratado bastante a la planta, se cortará por la base cerca del suelo. También hay que considerar que cada poda estimulará el crecimiento de hojas, pero reduce el de flores.

Esta planta es propensa a contaminarse con mosquitas blancas y áfidos, así que hay que controlar que en caso de presentarse habrá que usar un pesticida.

Para multiplicar la planta puede hacerse mediante esquejes, que es el método más fácil, o por semillas. Los esquejes se toman a comienzos de otoño o a finales de verano. Se colocan en un propagador con una mezcla de mitad turba y mitad arena, idealmente con un calentador de 25 °C. Descubre la Turba: qué es, tipos y cómo usarla.

Ahora que ya sabes cuáles son los cuidados de la Passiflora caerulea o flor de la pasión, también te puede interesar este artículo sobre el Sedum sieboldii: cuidados y reproducción.

Si deseas leer más artículos parecidos a Passiflora caerulea o flor de la pasión: cuidados, te recomendamos que entres en nuestra categoría de Cultivo y cuidados de las plantas.