Ser perito veterinario es una profesión fascinante y única dentro del amplio campo de la medicina veterinaria. Los profesionales peritos veterinarios no se dedican únicamente al cuidado y tratamiento de animales, sino que su rama de acción juega un papel crucial dentro del ámbito legal y judicial. Se debe a que son los encargados de proporcionar informes técnicos sobre salud y bienestar de animales, así como de analizar hechos y proporcionar pruebas expertas e imparciales que se basen en evidencia científica y técnica.
Si te apasionan los animales y estás considerando estudiar un grado en veterinaria, la rama de perito veterinario puede ser una opción interesante e ideal. Conoce más sobre qué es un perito veterinario y en qué consiste esta profesión en este artículo de EcologíaVerde.
¿Qué es un perito veterinario?
Tiene formación en la salud animal, pero se especializa en prestar colaboración en contextos legales, seguros o disputas que ameriten las experticias para aclarar hechos. Se diferencia de un veterinario tradicional, encargado de los cuidados y la recuperación de la salud del animal.
El perito veterinario cumple un papel fundamental en casos específicos, como una investigación en la que se determine si existió un caso de negligencia veterinaria que comprometiera la salud de un animal. Por tanto, sí tiene una relación con el ámbito de la veterinaria, pero es tangencial.
Funciones
Las funciones que ejerce un perito veterinario pueden ser bastante diversas y en ocasiones están definidas por el objetivo a cumplir dentro de su investigación. Esta rama de la veterinaria exige un profundo conocimiento de esta última y entre sus responsabilidades principales podemos encontrar:
- Evaluaciones forenses. Realizar análisis y valoraciones sobre el estado de salud de un animal en contextos de disputas legales.
- Emisión de informes periciales. El perito veterinario está facultado para elaborar documentos técnicos que sirvan como prueba en juicios y otros procedimientos legales.
- Testificación en juicios. Actuar como experto en audiencias judiciales, dando su opinión profesional sobre casos que involucren el bienestar animal.
- Investigación técnica y científica. En causas de muerte o lesiones de algún animal, el perito se encarga de realizar una investigación profunda de los acontecimientos. El objetivo es esclarecer las causas de lesiones, enfermedades o muerte del animal, según sea el caso.
Estas son algunas de las funciones principales que ejerce un perito veterinario, pero su rango de acción no se limita únicamente a lo mencionado, ya que depende del caso a tratar.
¿Qué estudiar para ser perito veterinario?
Si tu interés en la veterinaria va mucho más allá que el curar y tratar enfermedades y lesiones en mascotas, puede interesarte la vertiente de perito veterinario. Primero se requiere de una formación sólida en veterinaria para convertirte en un profesional en este ramo, ya que de acá parten los conocimientos fundamentales a través de los cuales llevar a cabo una investigación y experticia adecuadas.
Generalmente, debes haber cursado exitosamente un grado de veterinaria para poder formarte como perito veterinario debes haber cursado exitosamente un grado en veterinaria. Es en esta primera formación donde se aprenden conceptos fundamentales como salud animal, enfermedades, tratamientos y otros aspectos que te darán el conocimiento necesario para poder esclarecer en las investigaciones la realidad tras los hechos ocurridos.
Además, se recomienda también formarse en aspectos legales y periciales, los cuales complementarán la educación veterinaria y permitirá manejar adecuadamente la información requerida tanto en los informes periciales como ante un juzgado cuando sea necesario.
Elaborar un Informe Pericial
La elaboración de un informe parcial veterinario es una tarea principal en el ámbito de la medicina veterinaria. Este documento debe ser claro, preciso, e ir respaldado por las evidencias científicas levantadas durante la investigación.
Un buen informe incluye:
- Identificación de las partes y el objeto de la pericia.
- Antecedentes de la investigación y la documentación revisada.
- La metodología que fue empleada para llevar a cabo la experticia.
- Hallazgos encontrados.
- Discusión técnica junto a la valorización de los hallazgos.
- Conclusiones claras y fundamentadas que den respuestas a cada una de las preguntas planteadas previo a la investigación del caso.
- Anexos.
- Fecha, firma y datos de colegiación del perito.
Una vez cumplidos con todos estos pasos, se puede decir que el informe pericial cuenta con los requisitos de validez exigidos por la ley. Además, un buen informe puede incluir la historia clínica del animal y debe ser redactado en un lenguaje que sea accesible tanto para profesionales de la veterinaria, de la ley y para personas no especializadas.
Ser perito veterinario puede ser una profesión apasionante que une lo mejor de los mundos de la veterinaria y el ámbito legal. Sin embargo, es importante tener en cuenta que se deben seguir pasos rigurosos para ejercer esta profesión de la manera adecuada, así como formarse completamente en un grado en veterinaria que sea complementado con los estudios de las leyes vigentes.
Si sientes pasión por los animales, como por la justicia, la carrera de perito veterinario puede ser tu vocación ideal.
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