Saprófitos: qué son y ejemplos

Saprófitos: qué son y ejemplos

¿Sabías que la existencia de los organismos saprófitos es vital en la cadena trófica de todos los ecosistemas del planeta? La importante labor que desempeñan descomponiendo la materia orgánica muerta, reciclándola y transformándola en materia inorgánica, permite que las plantas dispongan de las sustancias inorgánicas que necesitan para alimentarse de forma autótrofa. Además, el reciclaje de la materia orgánica que llevan a cabo los saprófitos contribuye de forma directa al aumento de la fertilidad del suelo, el incremento de un humus rico en nutrientes y el mantenimiento de los complejos ciclos de nutrientes.

Si quieres aprender más sobre qué son los saprófitos y ejemplos, en este artículo de EcologíaVerde descubrirás con detalle la importante labor de estos organismos en el aprovechamiento y reciclaje natural de la materia orgánica.

Qué son los saprófitos

Proveniente del griego sapros (putrefacto) y fyton (planta), el concepto saprófito representa al conjunto de organismos cuya alimentación se basa en sustancias vegetales en descomposición. De este modo, los organismos saprófitos se distinguen por seguir un tipo de nutrición heterótrofa a base de sustancias de materia muerta en descomposición, principalmente provenientes de la mineralización de restos vegetales, como hojas secas, frutos y madera, entre otros. Entre los organismos saprófitos se encuentran numerosas especies de hongos, bacterias y protozoos, todos ellos pertenecientes al reino Protista.

No obstante, cabe destacar que en este grupo se incluyen solo y exclusivamente organismos de digestión externa, es decir, aquellos organismos unicelulares y pluricelulares que obtienen los nutrientes necesarios para su alimentación mediante la absorción de sustancias orgánicas. Dicha absorción puede realizarse mediante ósmosis (organismos osmótrofos) o a través de fagocitosis (organismos saprófagos). Es importante no confundir así a los saprófitos con otros organismos que se alimentan de materia muerta en descomposición mediante digestión interna, como los animales carroñeros, pues estos ingieren dicha materia y la digieren posteriormente en su interior.

Por otro lado, resulta interesante destacar cómo los organismos saprófitos se comportan como organismos parásitos en numerosas ocasiones. Dependiendo de esta transformación del comportamiento alimenticio, es posible distinguir la siguiente clasificación de los saprófitos:

  • Saprófitos verdaderos: se alimentan siempre de sustancias en descomposición sin dañar a otros organismos.
  • Parásitos facultativos: organismos saprófitos que, cuando disponen de un organismo hospedante adecuado, tienden a comportarse como parásitos. Este es el caso de numerosas bacterias y hongos que causan enfermedades y pudriciones en las plantas.
  • Saprófitos facultativos: organismos parásitos capaces de crecer de forma saprófita aunque no consiguen ser buenos competidores frente a saprófitos verdaderos presentes en el mismo organismo o misma porción del suelo en que se encuentran. En este caso se incluyen a la mayoría de los hongos y bacterias que se alimentan de restos foliares y vasculares de las plantas.

Dónde están los saprófitos

Gracias a la acción descomponedora de los saprófitos, la materia orgánica se recicla, formando el humus natural de los suelos. Por ello, es frecuente encontrar organismos saprófitos en ecosistemas que cuenten con la humedad y la cantidad de materia orgánica en descomposición necesaria para que puedan alimentarse.

Entre estos ecosistemas se incluyen suelos ricos en materia orgánica, bosques de coníferas y árboles caducifolios en los que es frecuente encontrar troncos en descomposición y restos vegetales. Así, según la naturaleza de la sustancia en la que se encuentren los saprófitos es posible clasificarlos como:

  • Humícolas: habitan sobre el humus formado en las capas altas del suelo por acumulación de restos vegetales en descomposición.
  • Lignícolas: la madera muerta de los troncos y ramas constituyen la base de su alimentación.
  • Terrícolas: se alimentan en zonas de suelos con poca vegetación y sin hummus, como los taludes y algunos bordes de caminos.
  • Folícolas: las hojas constituyen la dieta exclusiva de estos saprófitos, los cuales digieren tanto las nerviaciones como el limbo de las hojas.
  • Pirófilas: los terrenos quemados también sirven como fuente de alimentación a los saprófitos.
  • Cortícolas: en este grupo se incluyen aquellos saprófitos que se alimentan exclusivamente de la corteza de árboles caducifolios y de coníferas.

Ejemplos de saprófitos

Tal y como veíamos al inicio del artículo, los organismos saprófitos están representados por hongos, bacterias y algunos protozoos, todos ellos incluidos dentro del reino Protista. Dado que de los citados tres grupos de organismos los hongos son los más fáciles de encontrar en la naturaleza, a continuación incluimos una lista con muchos de los hongos saprófitos más comunes:

  • Kuehneromyces mutabilis
  • Armillaria mellea
  • Pleurotus ostreatus
  • Gloeophyllum sepiarium
  • Piptoporus betulinus
  • Marasmius hedera (crece sobre hojas de hiedra).
  • Marasmius epiphyllus (crece en hojas de robles).
  • Marasmius hudsonii (crece sobre hojas del acebo).

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Bibliografía
  • Pfenning, L. & Magalhaes, L. (2010). Hongos del suelo saprófitos y patógenos de plantas. Manual de Biología de suelos tropicales, Revista ACADEMIA, Acelerating the World's Research, pp:245-250.
  • Proyecto Biosfera (2021). La clasificación de los organismos. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, Gobierno de España. Recuperado de: http://recursostic.educacion.es/ciencias/biosfera/web/alumno/1bachillerato/organis/contenidos11.htm