Cosmética natural: qué es y su Responsabilidad Social Corporativa

Cuando hablamos de cosmética natural hacemos referencia a todos aquellos productos diseñados para el cuidado de la piel y del cabello que destacan por estar elaborados con ingredientes 100% naturales, como el argán, la manteca de karité o la lavanda, entre otros muchos.

Estos ingredientes, al ser naturales, son menos agresivos para la piel que los componentes químicos artificiales que podemos encontrar en el resto de cosméticos sin esta denominación, que, en ocasiones, resultan demasiado agresivos e irritantes para la piel. Por este motivo, uno de los principales beneficios de la cosmética natural es que ofrece productos potencialmente menos dañinos para la piel y el cabello, pues se adaptan a sus características propias. Así, son aptos para todas las pieles y cabellos, incluso para los más sensibles. Por otra parte, la cosmética natural contiene una mayor concentración de ingredientes activos y menos compuestos artificiales de conservación y otros aditivos.

Además, es fundamental saber que los beneficios de este tipo de cosméticos no se limitan al cuidado de la piel y del cabello, sino que, también, afectan al entorno, pues mejoran la sostenibilidad y la protección del medio ambiente. En este sentido, suelen comercializarse en envases biodegradables o reciclados, ser veganos y no estar probados en animales. Por último, cabe recordar que los productos de cosmética natural deben disponer de un certificado oficial que acredite que sus ingredientes son naturales, que no contienen sustancias químicas artificiales y que, por estas razones, pueden llevar la denominación de “cosmética natural”.

Respecto a la Responsabilidad Social Corporativa (RSC), se trata del compromiso voluntario y a largo plazo que adquieren las empresas, en este caso centradas en la cosmética natural, para desarrollar actividades orientadas a mejorar la sociedad y a cuidar el medio ambiente, un objetivo clave para preservar el planeta y la vida de las futuras generaciones y que depende de las medidas que se tomen en el presente para conseguir un cambio de tendencia.

En otras palabras, las empresas han asumido que su actividad genera un impacto a diferentes niveles y que deben tener un papel decisivo a la hora de revertir sus potenciales efectos negativos para la sociedad y el entorno. Así, forman parte de la Responsabilidad Social Corporativa acciones como el uso de energías renovables y materiales reciclados, la plantación de árboles o las donaciones económicas a distintas causas sociales.

En definitiva, la Responsabilidad Social Corporativa es un compromiso consciente de las empresas con la sociedad y con sus propios empleados, generando un valor añadido a su trabajo y una forma de dar respuesta a las preocupaciones sociales y medioambientales desde cuatro aspectos básicos, como son el social, el ambiental, el laboral y el económico. La Responsabilidad Social Corporativa, de cara a los consumidores, también mejora la reputación de las empresas que se adhieren a este compromiso, aumentando la fidelización y ampliando el mercado.

Una vez que sabemos qué es la Responsabilidad Social Corporativa, podemos hablar de algunos ejemplos concretos en el sector de la cosmética natural, como la marca Dr. Tree, que está dedicada a la cosmética natural para pieles sensibles. Cuenta con una gama de productos elaborados a partir de ingredientes naturales certificados por COSMOS Ecocert, que son de alta calidad, orgánicos y procedentes de la agricultura ecológica. El objetivo de la marca es respetar hoy el medio natural para asegurar el futuro. En esta línea, Dr. Tree ha desarrollado distintas acciones motivadas por la preocupación por la ecosostenibilidad y el cuidado del planeta y el deseo de constituirse como referencia en el ámbito de la clean beauty, que combina esta preocupación por el medio con el cuidado de la piel.

Sus actuaciones se basan en:

• La reducción de la huella de carbono.
• La gestión eficiente de los recursos naturales.
• El cuidado activo de los océanos.
• La colaboración con diferentes asociaciones para la educación ambiental y la concienciación sobre la necesidad de preservar el medio.

En cuanto a medidas concretas, Dr. Tree utiliza embalajes 100 % reciclables, ha creado una línea de geles y champús sólidos para ahorrar en envases y agua, participa en acciones de limpieza marina y recolección de basura y desarrolla charlas educativas y talleres sobre el entorno.

Por todo ello, Dr. Tree ha obtenido importantes certificaciones en sostenibilidad. También dispone del Certificado de Neutralidad Climática por la adopción de medidas como la plantación de árboles para neutralizar las emisiones de CO2. Además, todos sus productos son veganos y no están testados en animales.

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