Aceite de árbol de té: propiedades, para qué sirve y contraindicaciones
Las propiedades del aceite de árbol de té son antisépticas y expectorantes. Sirve para enfermedades respiratorias y para afecciones de la piel. Contraindicaciones: no debe usarse en personas alérgicas, debe colocarse en un frasco apropiado para evitar la oxidación causante de dermatitis alérgica de contacto y evitar el consumo interno.
El aceite de árbol de té se ha popularizado en los últimos años como un auxiliar en problemas cutáneos, pero desde los aborígenes australianos ya era usado para tratar problemas de garganta. No hay que confundirlo con el té verde, negro o rojo, que se obtiene de la infusión de las hojas de Camellia sinensis usado como bebida cafeinada, porque son dos plantas diferentes. La extracción del aceite esencial nos permite usar el aceite de té de muchas maneras diferentes, y en este artículo de EcologíaVerde te contamos las propiedades del aceite de árbol de té, para qué sirve y sus contraindicaciones.
Índice
Características del árbol de té
- Melaleuca alternifolia es un árbol originario de Australia que crece a 20 metros de alto.
- Las hojas son muy delgadas y alargadas.
- Produce una característica flor en espigas de color blanco con muchos estambres que sobresalen dando forma de cepillo.
Propiedades del aceite de árbol de té
El aceite esencial contiene terpinen-4-ol, cineol y gamma terpineno que le proveen las siguientes propiedades:
- Antisépticas
- Expectorantes
- Antifúngicas
- Bactericidas
- Antivirales
- Oxigenantes
Para qué sirve el aceite de árbol de té
Curar afecciones de la piel
El aceite esencial del árbol de té es el ingrediente natural por excelencia para tratar problemas de la piel. Es de fácil absorción y en casos de acné ayuda a limpiar los poros a profundidad mientras evita el asentamiento de nuevas bacterias. Lo mismo ocurre para tratar cortadas superficiales u hongos como la cándida, la caspa capilar o infecciones vaginales. Por la capacidad antiinflamatoria ayuda a calmar lesiones por herpes, aftas bucales y gingivitis. Al paso que desinfecta y desinflama, también estimula el desarrollo de tejido nuevo y oxigena los tejidos.
Descongestiona los pulmones
Por sus propiedades expectorantes, el aceite de té es útil en casos de problemas respiratorios, ayudando a abrir los pulmones para facilitar la respiración. También será bueno en casos de enfermedades causadas por virus o bacterias por su acción antiséptica que eliminará los patógenos alojados en nariz y garganta. Ayudará al sistema inmune a sobrepasar la enfermedad más rápido.
Cómo usar el aceite de árbol de té
El aceite de árbol de té se obtiene por destilación de los aceites volátiles. Difiere de los aceites vegetales porque no se obtiene de semillas oleaginosas, sino de las minúsculas partículas contenidas en las hojas. Al ser un concentrado compuesto solamente por los aceites volátiles y activos de la planta se requiere una cantidad muy pequeña. Revisemos cómo usarlo correctamente.
Aplicación tópica directa
Un estudio [1] determinó que el uso de aceite de árbol de té es más efectivo sobre bacterias gingivales al 100% que a diluciones menores, así que se deberá tomar una gota directamente del aceite y aplicar sobre el área tópica afectada. Igualmente, deberá usarse para tratamientos localizados para verrugas, acné u hongos.
Preparados cosméticos
Muchas fórmulas en el mercado contienen aceite de árbol de té, como tónicos faciales, jabones, shampoos o geles, facilitando la incorporación a nuestra rutina.
De no encontrar preparados, también se puede añadir una gota de aceite esencial a productos cosméticos que ya tengamos en casa para atribuirle las propiedades del árbol de té. Hay que buscar formulaciones simples, sin ingredientes complejos, para evitar que el aceite reaccione de forma indeseada. La mezcla se hará sobre un algodón o sobre la palma de la mano.
Emplastos
En zonas donde la afección cubra una parte considerable de la piel se preparará un diluido de 1 gota de aceite esencial en una cucharada de aceite de oliva. Se extiende una capa delgada sobre la parte a tratar y se cubre con una gasa, a repetir hasta ver mejoría.
Vahos
Los vahos son confortantes cuando hay problemas respiratorios, y además de poder hacerlos con las hojas se puede hacer con el aceite esencial. Se colocará en una olla de agua caliente con vapor una gota del aceite de árbol de té. Dentro se acerca la cabeza y se cubre con una toalla para no dejar escapar el vapor. Se respira dentro por intervalos, saliendo a tomar aire para evitar sofocación.
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Contraindicaciones del aceite de árbol de té
- El aceite de árbol de té debe evitarse en personas con alergia conocida a él.
- El consumo interno se desaconseja porque es tóxico, provocando vómitos, diarrea, alucinaciones y hasta coma en casos severos. Puesto que se usa como remedio externo, este riesgo es casi nulo, pero hay que saberlo.
- Al usar tópicamente no se recomienda la aplicación directamente porque puede causar irritaciones, a menos de casos donde se requiere un efecto localizado fuerte como los mencionados.
- No se aconseja usarlo por largo tiempo porque puede desarrollarse una dermatitis alérgica de contacto. Esta sensibilidad aumenta con la oxidación del aceite esencial, y sucede cuando se expone a luz o aire, así que hay que procurar usar el aceite en un gotero de vidrio ámbar con dosificador de gota para reducir el riesgo.
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- Enríquez Herrera, A. C. (2019). Efecto inhibitorio del aceite esencial de árbol de té (Melaleuca alternifolia) sobre cepas de Porphyromonas gingivalis al 50%, 75% y 100% de concentración a 24, 48 y 72 horas. Estudio in-vitro (Bachelor's thesis, Quito: UCE).
- Cebrián, J. (2002) Diccionario de plantas medicinales. Barcelona: RBA Libros.
- Santesteban, R., Hervella, M., Larrea M., Loidi , L., Agulló, A., & Yanguas, I. (2015). Efectos secundarios de la aplicación tópica de un aceite de esencial: dermatitis alérgica de contacto a aceite de árbol de té. In Anales del Sistema Sanitario de Navarra (Vol. 38, No. 1, pp. 163-167).
