Cómo injertar un naranjo

A la hora de realizar un injerto, elegir el momento adecuado es un punto vital para maximizar las posibilidades de éxito del mismo. La mejor época para injertar naranjos es cuando el árbol se encuentra muy activo, en plena temporada de crecimiento. En esta época será cuando es más probable que la savia circule correctamente entre injerto y patrón y este salga bien.

Esto se da habitualmente en primavera, entre abril y finales de julio, aunque en algunos climas podemos estirar la época de injerto hasta septiembre. Si no tienes claro si tu clima coincide con los meses indicados, ten en cuenta que el naranjo estará en una fase de crecimiento adecuada con una temperatura de entre 20 ºC y 29 ºC una vez pasados los meses fríos.

Hay una gran cantidad de técnicas de injertos que pueden utilizarse con los cítricos, como el injerto de incrustación, el injerto de púa, el injerto en cuña, el injerto en corona, el injerto en ele invertida o injerto de escudete.

Todas ellas tienen sus pros y sus contras, pero en esta ocasión vamos a centrarnos en el injerto en escudete. Sus principales puntos a favor son su facilidad de realización, que la hace más adecuada para no expertos en la materia, y que el corte en forma de T invertida tiene la ventaja de facilitar la no acumulación de agua en el injerto, por si llegaran lluvias o se mojara al regar. Veamos cómo hacer un injerto de naranjo paso a paso:

1. Desinfecta tus herramientas de injerto. Es vital que las esterilices con alcohol o algún producto específico, puesto que vamos a practicar heridas abiertas a las plantas y hay que minimizar las posibilidades de infección.
2. Limpia el patrón o portainjerto de hojas, ramas o espinas si las tuviera. Es conveniente que el tallo esté lo más limpio posible.
3. Realiza en el portainjerto un corte en forma de T invertida. Como hemos mencionado antes, el corte con esta forma evita que el agua de las posibles precipitaciones o riego se acumule en la herida, algo que no convendría y podría provocar la aparición de hongos o enfermedades. Lo ideal es hacer el injerto a una altura aproximada de unos 20 o 25 cm de la base. ¿Por qué tan abajo? Cuanto más bajo esté el injerto, más difícil es que otras ramas o brotes roben savia y nutrientes al esqueje, que sobre todo al inicio, es lo que más nos interesa.
4. Corta la yema del injerto, manteniendo aproximadamente un centímetro de tallo por encima y por debajo de la yema. No pasa nada si el corte tiene algo de madera en la cara interna, de hecho es habitual. No la retires. En este punto, es muy recomendable evitar tocar la yema con las manos, ya que podríamos ensuciarla o infectarla. Cógela por el peciolo o, si se ha desprendido, utiliza tus herramientas.
5. Inserta el injerto en el corte del patrón, procurando que quede bien sujeto y encajado, con toda la superficie de contacto posible entre ambos. Corta lo que sobresalga del injerto, y envuélvelo con cinta para injertos o cualquier otro material inerte.
6. Corta el portainjerto por encima del injerto. Deja el árbol en una ubicación de semisombra las primeras semanas mientras compruebas si el injerto empieza a crecer y ha tenido éxito. En estos primeros días, riega a menudo. Pasadas unas seis semanas, puedes retirar la envoltura del injerto.

Si lo que nos interesa es cómo injertar un naranjo viejo, será mejor hacer el injerto siguiendo la técnica de lengüeta y hacerlo a mediados de invierno.

Tras aprender a injertar el naranjo, te animamos a consultar estas otras guías sobre los Cuidados el naranjo enano y Cómo cultivar un naranjo en maceta.

Los limoneros, como cítricos que son, resultan buenos portainjertos para el naranjo, además de resistir mejor algunos climas más fríos. Por ello, y por lo práctico que resulta tener limones y naranjas en el mismo árbol, injertar un naranjo en un limonero es una muy buena opción.

Podemos seguir utilizando el método de escudete anteriormente descrito, aunque si queremos que el árbol crezca en vertical a partir del injerto, podemos realizar un injerto de hendidura.

1. Corta el tallo principal del patrón a la altura deseada, haciéndole un corte longitudinal de unos 5 cm de largo.
2. Prepara la estaca o púa que hará de injerto, dándole una forma de cuña que se adapte al corte realizado en el patrón.
3. Tras introducirlo, envuelve con cuerda o cinta el injerto y corta el extremo de la estaca para dar lugar a más brotes laterales.

Para más información, te recomendamos estos otros artículos de EcologíaVerde sobre Cuándo y cómo injertar un limonero y Cómo hacer injertos de árboles frutales.

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