Malvavisco: propiedades, beneficios y contraindicaciones

La comúnmente conocida como malvavisco o altea, (Althaea officinalis), es una planta aterciopelada nativa de Europa, norte de África y Asia Occidental, aunque hoy en día también se puede encontrar en algunas zonas de Norte América. Tiene predilección por lugares húmedos, como zonas pantanosas, riberas fluviales e incluso terrenos cerca del mar y puede tolerar bien los suelos con alta salinidad.

Esta herbácea de tallo erecto puede llegar a los dos metros de altura, pero la solemos encontrar entre los 40 y 120 centímetros. Las flores suelen ser de color blanco con tonos ligeramente rosados y aparecen entre los meses de mayo y agosto. Es perenne, por lo que es común verla en jardines como planta ornamental, pero su característica más importante es que se puede dar un uso medicinal a todas y cada una de sus partes.

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La mayor parte de las propiedades del malvavisco se deben a su alto porcentaje de mucílago, una sustancia de textura viscosa presente principalmente en sus raíces pero también en sus flores. Además, esta planta también contiene otros principios activos, como los aceites esenciales, asparagina, pectina, fitoesteroles y encimas de los que los seres humanos nos hemos beneficiado durante siglos.

A continuación te indicamos algunas de las propiedades más destacadas del malvavisco:

• Propiedades demulcentes: la propiedad más importante del mucílago es su capacidad demulcente, es decir, la capacidad de esta sustancia de crear una capa protectora sobre las membranas de los órganos.
• Propiedades mucolíticas y expectorantes: no solo ayuda a disminuir la viscosidad de las secreciones bronquiales sino que también ayuda a activar los mecanismos de eliminación de estas.
• Propiedades antitusígenas: en un estudio sobre los efectos de los polisacáridos del malvavisco sobre la tos se observó que estos la alivian de manera más efectiva que otros medicamentos.
• Propiedades antiinflamatorias: algunos componentes del malvavisco promueven que el sistema inmunológico genere respuestas antiinflamatorias, aliviando así la inflamación de los tejidos y permitiendo que estos se puedan regenerar.
• Propiedades digestivas: ayuda a equilibrar el pH estomacal reduciendo la acidez.
• Propiedades laxantes: aunque limitadas, las propiedades laxantes del malvavisco pueden ayudar en casos puntuales de estreñimiento.
• Propiedades diuréticas: ayuda a incrementar la cantidad de agua y sodio expulsadas a través de la orina.

En la Antigua Grecia, este arbusto no solo se empleaba para decorar las lápidas de los difuntos, sino que también se consumía frecuentemente debido a sus destacados usos médicos. Estos son algunos de los beneficios del malvavisco que hacen que su uso a nivel medicinal se haya mantenido hasta día de hoy:

• Protección y reparación de las mucosas respiratorias: el mucílago del malvavisco es el encargado de crear una barrera protectora sobre la mucosa de los órganos respiratorios, permitiendo así que el tejido se recupere más rápidamente y contribuyendo a al alivio del dolor de garganta.
• Alivio de la congestión: sus propiedades mucolíticas y expectorantes ayudan descongestionar las vías respiratorias en casos de tos productiva.
• Alivio de la tos: las infusiones de las hojas y flores son usadas para favorecer el alivio de la tos seca.
• Protección y alivio de trastornos del tracto digestivo: sus propiedades para reducir la acidez estomacal ayudan a aliviar el malestar causado por la gastritis y las úlceras duodenales así como malestar causado por la gastroenteritis o síndrome del colon irritable
• Protección y alivio de trastornos del tracto urinario: se usa para tratar casos de cistitis y piedras en el riñón.
• Cuidado de la piel: por lo que se refiere al uso externo, la raíz tiene propiedades que ayudan a aliviar la piel seca y contribuye a la recuperación del tejido en casos de abscesos y quemaduras.

Una de las maneras más sencillas de disfrutar de sus beneficios es a través de la decocción del malvavisco. Tan solo es necesario hervirlo durante dos o tres minutos y dejarlo reposar de cinco a diez minutos más.

Además, el malvavisco se puede combinar con otras plantas curativas, como el hinojo, el boldo, la frángula, el anís verde, la salvia o el saúco. Por ejemplo, para el estreñimiento puntual, se puede hervir malvavisco combinado con frángula y anís verde.

También se puede conseguir en forma de concentrado en algunas tiendas. En este caso, solo se deben añadir unas gotas de este concentrado a un vaso de agua y ya estaría listo para ser consumido.

Una vez ya sabemos las propiedades y los beneficios del malvavisco, así como los diferentes métodos para ingerirlo, vamos a ver cuáles son los efectos secundarios y contraindicaciones de esta planta.

Efectos secundarios del malvavisco

Los efectos secundarios del malvavisco son poco frecuentes. Es una buena idea empezar a tomarlo en dosis pequeñas e irlas incrementado gradualmente hasta llegar a la dosis total si no se percibe ningún efecto secundario. Por lo que respecta al uso tópico, puede causar irritación de la piel en algunos casos.

Contraindicaciones del malvavisco

Como hemos visto anteriormente, el mucílago presente en el malvavisco tiene muchos beneficios para nuestra salud y nos puede ayudar a aliviar síntomas desagradables. Aun así, es el mismo mucílago el que, recubriendo las membranas de aparato digestivo, puede bloquear la absorción de otras medicinas. Por esta razón se recomienda:

• Tomar malvavisco al menos dos horas antes o dos horas después de tomar medicación.
• No se recomienda tomar malvavisco durante el embarazo o la lactancia sin consultar al médico previamente.
• Deben evitarla las personas con diabetes, ya que la raíz del malvavisco puede ayudar a disminuir los niveles de azúcar en sangre por lo que la combinación con medicación para la diabetes puede resultar en niveles de azúcar demasiado bajos.

Este artículo es meramente informativo y se recomienda consultar el médico de cabecera antes de tomar malvavisco.

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