Monstera standleyana: cuidados y reproducción

• La Monstera standleyana tiene hojas lanceoladas y alargadas con la punta más delgada que la base, brillantes y con cierta textura en las venaciones, por lo que se asemeja bastante a un filodendro. Comúnmente se le puede encontrar como filodendro standleyana o filodendro cobra, aunque de cierto modo es incorrecto llamarlas así porque no son verdaderamente un filodendro.
• Otra característica importante de esta especie es que tiene rayas cortas y manchitas de color blanco, en patrones que no son siempre iguales. A partir de esta peculiaridad se han desarrollado muchas nuevas variedades creadas por el hombre. Hay un cultivar llamado Monstera standleyana albo variegata que tiene partes completamente blancas, haciéndolo un ejemplar muy especial y de colección, con precio aún más alto que el de la especie común. Otro ejemplo es Monstera standleyana variegada blanca que tiene esta coloración blanca solamente en manchas espaciadas.
• Las hojas se acomodan rígidas hacia afuera, de forma muy acomodada, y casi siempre dirigiendo las puntas hacia arriba.
• Miden cerca de 10 centímetros de largo, y clasifican dentro de las monsteras de hoja pequeña. Cuando la planta aumenta de edad, las hojas crecen unos centímetros más. Para ver las hojas de mayor tamaño es necesario que tengan un soporte, sea una pared, árbol o tutor, porque en su hábitat natural esto es lo que permite el crecimiento.
• Esta especie presenta dos formas distintas según el nivel de desarrollo. Las hojas juveniles producen tallos directos del suelo, y a partir de ellos crecen y trepan hacia arriba. A diferencia de algunas otras monsteras, como por ejemplo en M. adansonii, el tallo no es muy largo y las hojas salen muy apretadas de él. Por esta razón, son plantas de follaje denso.
• La planta total puede llegar a medir hasta 20 metros si se le deja crecer libremente, aunque en interiores ronda los 2 metros.
• Carecen de los orificios llamados fenestras que suelen ser comunes en el género Monstera.

Solía ser poco común y muy exótica, pero ya se comercializa más, así que si llegas a encontrar alguna a la venta te dejamos los cuidados básicos que necesitas proveerle. Aquí puedes conocer cuál es su precio.

• M. standleyana debe tenerse en interiores o bajo luz filtrada, porque de otra forma el sol quemará las delicadas hojas. Se puede tener fuera siempre y cuando no reciba luz directa.
• Debe mantenerse en temperatura cercana a los 25 °C, y no se lleva bien con climas fríos.
• En cuanto a la ubicación, lo más recomendado es tenerla cerca de una ventana. Puede dejarse como planta colgante, o colocar un tutor para que trepe sobre él y que tome forma compacta.

Se preparará una mezcla de sustrato universal a base de partes iguales de turba y humus de lombriz, y añadiendo un puñado de perlita, tepojal, vermiculita o grava, para promover una buena estructura del suelo con excelente drenaje y con menor riesgo de pudrición en raíces.

2 veces al año puede añadirse una capa superficial de humus de lombriz sobre el sustrato a modo de abono, o también puede aplicarse fertilizante líquido.

Aquí puedes comprar la turba y el humus de lombriz, necesarios para poder hacer la base del sustrato.

No requiere de mucho riego, así que es una gran planta para quienes buscan una planta bonita, pero sin muchos cuidados. Será suficiente regarla una vez por semana.

Eso sí: tienen una gran dependencia de la humedad ambiental, así que será bueno atomizar agua en las hojas recurrentemente, especialmente si se vive en un lugar bastante seco. A falta de humedad, las hojas comenzarán a volverse más rugosas y enrolladas.

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La poda en esta planta no es indispensable, pero será bueno quitar cualquier hoja que muestre signos de edad, para evitar el derroche de energía en hojas que ya van de salida.

Por otro lado, esta planta trepadora puede llegar a medir varios metros de largo, así que se puede podar para mantenerla más pequeña y bajo control.

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La reproducción de esta planta se hace mediante esquejes en hidroponía, pues desarrollarán raíces fáciles por la presencia de nodos aéreos.

1. El primer paso es lavar y esterilizar las tijeras que se usarán para cortar el tallo.
2. Se escogerá una planta sana y que tenga por lo menos una hoja para asegurar que la nueva planta se va a poder desarrollar.
3. El corte se debe hacer sobre un nodo para poder colocarlo después en un vaso con agua. Se obtendrán raíces nuevas a las pocas semanas.
4. El esqueje se llevará a tierra con sustrato bien preparado, y se regará copiosamente durante las primeras semanas para que tenga buen aporte de agua mientras se asienta.

Los esquejes pueden usarse para una planta nueva, o para colocar dentro de la misma maceta inicial para aumentar su volumen. El tiempo perfecto para propagarla es durante la primavera, momento en que la planta está con buen crecimiento y está fuerte.

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