Potus o poto: cuidados, riego y reproducción
Los cuidados del potus o poto son luz a semisombra o filtrada, temperatura sobre los 20 °C y sustrato universal. El riego debe ser moderado esperando a regar cuando se seque la primera capa. La reproducción es mediante esquejes.
El potus o poto es una planta ampliamente extendida por los hogares de todo el mundo. Las claves de su éxito radican en lo poco exigente que es con sus cuidados, siendo una planta ideal para cualquier aficionado a la jardinería o para aquellos que buscan iniciarse con algo sencillo. Si quieres aprender a cuidar de esta planta, sigue leyendo este artículo de EcologíaVerde en el que te explicamos los cuidados del potus o poto, su riego y reproducción.
Características del potus
- Pese a su nombre común, potus o poto, el Epipremnum aureum no pertenece al género Pothos, y es que se le llama así porque antiguamente sí estaba clasificado dentro de este.
- Se trata de una planta originaria de Nueva Guinea, Malasia e Indonesia.
- Es una planta trepadora o colgante que, en su entorno natural, puede alcanzar alturas de hasta 20 metros. Si te gustan este tipo de plantas, no te pierdas estas Plantas trepadoras.
- Tiene raíces aéreas que le sirven para sujetarse a troncos, o estructuras que le queden cerca.
- Sus hojas, perennes, tienen forma de corazón. Pueden ser completamente verdes, o también las hay variegadas con detalles amarillos. Son de textura brillante.
- Es bastante difícil verla florecer, incluso en su entorno natural.
- Tiene capacidad de purificar el aire, soportando incluso hogares o entornos en los que habitualmente hay humo. Remueve partículas contaminantes como el xileno. No te pierdas estas Plantas que purifican el aire.
- Es tóxica si se ingiere, así que hay que mantenerla lejos de animales de compañía o de niños.
Si te gustaría tener esta planta en casa, en este botón puedes ver su precio.
Temperatura, luz y ubicación para el poto
- El potus se cultiva habitualmente como planta de interior, aunque requiere de ambientes muy iluminados.
- La luz que necesita debe ser luz indirecta o estar tamizada por una cortina, por lo que es mucho más popular como planta de interior. Es posible también tenerla cerca de una ventana. Si recibe luz directa, las hojas pueden quemarse o enroscarse. Asimismo, tu poto podría desarrollar ahilamiento: tallos muy largos, finos y desprovistos de hojas, que es la forma de la planta de hacer un esfuerzo extra por encontrar la luz.
- En cuanto a la temperatura, en su medio natural crece en las selvas tropicales húmedas de Asia, así que requiere siempre más de 20 °C.
Riego del poto
- El poto es una planta de riego moderado, y nunca excesivo. Riega solo cuando el sustrato esté seco más allá de la capa superficial. Si llegas a regar de más, hay probabilidad de que las raíces se pudran, así que evítalo dentro de lo posible.
- En verano y primavera el riego debe ser más abundante, y debe espaciarse para otoño e invierno.
- Si tu hogar es muy seco, puedes pulverizar agua sobre sus hojas y tallos de vez en cuando, siempre sin excederse ni encharcar. También, para aportarle al potus la humedad ambiental que necesita si el clima de tu zona o el ambiente de tu hogar son muy secos, puedes colocar un pequeño plato con agua y guijarros o piedras grandes en él, por encima del nivel del agua. Aquí puedes comprar un pulverizador de agua para plantas.
- Dado que las hojas son brillantes, el polvo que llegue a caer sobre ellas se adhiere con facilidad y es bastante visible, así que te recomendamos pasar un paño húmedo para limpiarlas una vez al mes. Esto también ayudará a mantener la superficie limpia, con lo que podrá fotosintetizar mejor y crecer con más fuerza.
Te recomendamos leer estos otros artículos sobre Las mejores regaderas para plantas y Cuándo regar las plantas.
Sustrato para el potus
Una de las pocas cosas que el poto necesita, o más bien agradece, es una buena humedad ambiental, pero esto no debe confundirse nunca con mantenerle un suelo encharcado. De hecho, es importante que tu potus tenga un sustrato con un buen drenaje, que no acumule humedad en sus raíces.
Para ello, puedes utilizar la mezcla universal que recomendamos a menudo para semilleros, mezclando turba, humus de lombriz y fibra de coco a partes iguales, y añadiendo luego un puñado de vermiculita y otro de perlita. Así conseguirás un sustrato con un drenaje excelente, aireado y muy rico en nutrientes, perfecto para tu planta.
Además, dentro de los cuidados del poto en maceta, se recomienda usar una maceta que tenga orificio al fondo, además de que puedes colocar una capa inferior de grava volcánica para que el exceso de agua logre salir.
Aquí puedes comprar la mezcla para preparar el sustrato universal:
Abono para el potus
Aunque se trata de una planta no muy exigente, un potus necesitará fertilizante para desarrollarse adecuadamente.
- Puedes añadir una capa de mantillo a base de compost o humus de lombriz, cada 15 días.
- Otra opción es usar fertilizante universal.
- Aplica el abono especialmente durante los meses cálidos, desde primavera a verano, dejando que la planta respose después.
En este botón puedes comprar el fertilizante universal.
Trasplante del poto
Si tu potus se encuentra en condiciones óptimas, es posible que crezca tan rápido que su maceta se quede pequeña enseguida. Esta planta tolera hasta un trasplante al año cuando es necesario, siendo la primavera la mejor época para hacerlo, aunque también es posible practicarle trasplantes de emergencia ante excesos de riego o problemas de pudrición. Sabrás que la maceta de tu poto se ha quedado pequeña si las raíces asoman por los agujeros de drenaje del fondo de la maceta, siendo necesario cambiarla lo antes posible.
Te recomendamos leer este otro artículo sobre Trasplantar una planta: cuándo y cómo hacerlo. Además, aquí puedes ver el precio de macetas.
Reproducción del poto
Dado que es muy difícil que la planta dé flor, el mejor método reproductivo es el asexual, a través de esquejes. Estos son los pasos:
- Busca un poto sano y que tenga tallos muy largos de donde puedas hacer un corte de unos 10 centímetros mínimo.
- Ubica el nudo y corta sobre él. De aquí saldrán las raíces nuevas así que es muy importante que lo mantengas. Las herramientas que uses para cortar deben estar bien lavadas y desinfectadas para evitar que bacterias y hongos se asienten.
- Coloca el corte en una botella o frasco con agua. Esta agua debe estar limpia. Si tienes disponible, puedes colocar unas gotas de enraizante.
- Espera a que las primeras raíces comiencen a brotar. Una vez alargadas, puedes trasplantar. También puedes dejarlo directamente en agua.
- Prepara un sustrato como se indicó previamente, y coloca tu planta dentro. Procura no exponer demasiado las raíces al aire y hacer el proceso rápido pero con certeza.
- Riega.
Por qué hay hojas amarillas en el poto y cómo recuperarlo
Las hojas amarillas son indicativo de una serie de razones, que son las siguientes:
- Exceso de sol: dado que es una planta de semisombra, tenerla directamente al sol puede quemar las hojas y debilitarlas al punto de ponerlas amarillas. Si la tienes en sol completo, cámbiala de lugar y espera un par de semanas a que aclimate de nuevo.
- Exceso de riego: cuando las raíces comienzan a pudrirse, las hojas pueden volverse amarillas. Esto puede suceder también por un sustrato que contenga mal proporción de materiales, o que no tenga algún compuesto como perlita o vermiculita. Revisa las raíces de tu planta, y si están aguadas, es señal de pudrición. Remueve aquellas que estén maltratadas, y aparta las que no para rescatarlas. Coloca en una nueva maceta con sustrato preparado como anteriormente se detalla.
- Falta de nutrientes: las hojas pueden volverse amarillas por falta de hierro, así que puedes agregar un poco de fertilizante universal para remediar en este caso.
Ahora que ya conoces los cuidados del poto, no te pierdas este artículo sobre los Potos en agua: cuidados, reproducción y hojas amarillas.
Si deseas leer más artículos parecidos a Potus o poto: cuidados, riego y reproducción, te recomendamos que entres en nuestra categoría de Cultivo y cuidados de las plantas.