Limonero en maceta: cuidados, cómo plantarlo y enfermedades

Antes de aprender cómo plantar un limonero en maceta grande o pequeña, según el tamaño del árbol, con esta guía, te indicamos que necesitas reunir algún material y conocer algunos datos. Lo primero que necesitas es, evidentemente, una maceta de suficiente tamaño como para albergar uno de estos árboles. Se aconseja utilizar una con al menos 80 cm de profundidad, aunque en una de unos 50 cm puedes llegar a cultivar limoneros en miniatura. Además, desde EcologíaVerde te recordamos que es importante que la maceta tenga agujeros de drenaje en la base.

1. Una vez te hayas hecho con la maceta adecuada, tendrás que elegir la variedad de limonero en concreto que deseas. Dado que vas a plantarlo en una maceta, el limonero Meyer es el más adecuado para interior, aunque el limón rayado de pulpa rosa también puede ser una buena elección. Aquí puedes conocer más sobre los Tipos de limoneros.
2. Es posible plantar el limonero desde una semilla, pero los árboles muy jóvenes de este tipo pueden encontrar serias dificultades para desarrollarse adecuadamente en interiores. Por este motivo, te aconsejamos hacerte con un limonero de unos 2 o 3 años de edad.
3. Cuando hayas tomado las decisiones pertinentes, prepara la maceta con un fondo de drenaje compuesto por piedras menudas o grava y colócala sobre un plato más ancho para que pueda mantener algo de humedad.
4. A continuación, llena la maceta con sustrato. Este árbol necesita de una mezcla de sustrato ligeramente ácida o con pH neutro, como las que contienen un buen porcentaje de turba. Si tienes sustrato para cactus o plantas crasas en casa, también puedes usarlo para cítricos.
5. Saca el limonero de su maceta original con mucho cuidado y quita la tierra sobrante de las raíces, separándolas con los dedos sin romperlas. Esto ayudará a que las raíces se extiendan mejor por su maceta nueva.
6. Colócalo en la maceta, bien erguido, sobre una base de unos 15 o 20 cm de mezcla para luego llenar la maceta hasta arriba. Comprueba que las raíces no queden expuestas, pero tampoco dejes una gran parte del tronco cubierto de tierra.
7. Tras plantarlo, riega el limonero para humedecer la tierra (sin encharcar) y colócalo en una zona soleada en la que reciba al menos 8 horas de luz directa al día.

Aquí puedes descubrir más sobre Cómo plantar un limonero. Si quieres adquirir uno, aquí puedes ver el precio de un limonero.

Asegúrate de proporcionar a la planta un riego frecuente pero no excesivo. Se trata de mantener un nivel de humedad adecuado en la tierra, de forma que nunca llegue a secarse demasiado ni a encharcarse. No soporta las sequías pero tampoco la tierra encharcada constantemente.

Si tu limonero empieza a perder las hojas, podría significar que lo estás regando demasiado. Para asegurarte de que esto no ocurra, te desvelamos un truco que te ayudará: introduce un palito en la tierra y, a continuación, sácalo con cuidado. Si lo sacas seco y sin tierra pegada, es que ha llegado el momento de regar tu limonero.

Aquí puedes conocer Las mejores regaderas para plantas.

Como ya hemos dicho, el limonero precisa de muchas horas de luz natural directa. Desde EcologíaVerde te recomendamos que dejes esta planta al sol durante 8 horas como mínimo. No obstante, si resides en un lugar donde el sol tiene extraordinaria intensidad, puedes poner el limonero en semisombra.

En invierno, procura que el árbol no se encuentre en una zona excesivamente cálida. Intenta que se mantenga en alguna estancia por debajo de los 15 ºC, pero a más de -3 ºC o causará daños graves en el árbol. La temperatura ideal el resto del año es de entre 17 y 28 ºC.

Respecto al abonado y a los nutrientes, el limonero es un árbol muy exigente, así que no tengas miedo de abonarlo siempre que lo creas necesario. Enriquece la mezcla justo después de plantarlo y hazlo de nuevo cada 3 o 4 semanas en los meses cálidos y cada 6 u 8 en los fríos. Como ocurre con muchas otras plantas, el humus de lombriz es una apuesta muy segura. Aquí puedes adquirirlo.

La poda también es muy importante en este árbol, especialmente para controlar su crecimiento. Si quieres tener la maceta de tu árbol en interior, lo mejor será que prestes especial atención a este paso. La poda de formación se lleva a cabo en primavera, tras la cosecha.

Si quieres más información sobre este paso, no te pierdas este artículo sobre Podar un limonero: cómo y cuándo hacerlo. También puedes encontrar aquí Las mejores tijeras de podar.

Por último, te informamos que si quieres que tu limonero dé frutos y lo tienes en interior, es probable que, debido a la falta de insectos, tengas que polinizarlo tú mismo de forma manual con un pincel. Llevar a cabo esta tarea no es tan complicado como parece, pero sí debes conocer las partes básicas de la planta para poder llevar a cabo la polinización de forma manual.

Para reproducir el limonero, aunque tiene semillas en el interior de sus frutos, que caen en la tierra y terminan por germinar y crecer o las podemos recoger y sembrar, lo más práctico y fácil es reproducirlo por esqueje e injerto. Aquí puedes conocer todo sobre Injertar un limonero: cuándo y cómo hacerlo.

En cuanto a las enfermedades del limonero en maceta, debes saber que este tipo de árbol es propenso a las mismas amenazas que los limoneros de exterior. Estas son:

• Virus de la tristeza
• Alternaria alternata
• Exocortis
• Psoriasis
• Penicillium

Las plagas del limonero que son más habituales son:

• La cochinilla
• El pulgón
• La araña roja

Si los localizas en tu limonero, lleva a cabo cuanto antes un tratamiento específico para eliminar plagas y enfermedades en tu árbol. Si quieres aprender más sobre las Plagas y enfermedades del limonero y Cómo eliminar una plaga en un árbol de limón, échale un vistazo a este otro artículo de EcologíaVerde.

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