Mesofauna: definición y ejemplos

La mesofauna del suelo, o también llamada mesofauna edáfica, es el conjunto de animales de tamaño mediano que habita sobre el suelo. Para ser clasificados como tal, deben medir entre 0.1 a 2 milímetros, además de ser principalmente artrópodos.

Ahora bien, ¿qué papel desempeña la mesofauna en el suelo? Son importantes ingenieros del suelo al fragmentar los desechos y procesarlos en un fenómeno llamado bioturbación. Por otro lado, regulan las comunidades bacterianas, fúngicas y algáreas del suelo, pues se alimentan de ellos, contribuyendo a la descomposición de elementos necesarios para el ciclo de nutrientes.

Hoy en día se usa el análisis de la mesofauna del suelo para análisis ambientales para conocer las condiciones medioambientales, y si es que existe algún tipo de perturbación.

A continuación te presentamos algunos ejemplos de mesofauna edáfica o del suelo para que conozcas más al respecto. Además, te contamos más detalles sobre Qué son los artrópodos: características, clasificación y ejemplos, aquí.

Los colémbolos son pequeñísimos artrópodos que pueden saltar gracias a un apéndice en su cola. Son sumamente comunes en el suelo, especialmente donde se agrupa la hojarasca. Suelen forman agrupaciones de varios individuos y son importantes descomponedores de materia orgánica.

Su alimentación es muy especializada según el tipo de colémbolo. Los hay comedores de:

• Hifas fúngicas.
• Hojas en descomposición.
• Bacterias.
• Insectos.
• Protozoarios.
• Algas.

En sus heces se depositan múltiples microorganismos como bacterias o gusanos, que son importantes descomponedores parte de la dinámica mesofaunística del suelo.

Te contamos Qué es materia orgánica e inorgánica en el siguiente post de EcologíaVerde.

Los oligoquetos son mejor conocidos como lombrices, y bajo esta categoría están los enquitréidos, que son pequeñas lombrices de color blanco transparente. Son muy fáciles de encontrar en suelos ricos en contenido orgánico.

Su alimento principal son las hifas de hongos y excreciones de otros animales, pues a pesar de que son parientes de las lombrices de tierra no pueden procesar la hojarasca ni detritos de materia orgánica. Estas famosas lombrices rosas de tierra corresponden a la macrofauna, lo que te ayudará a imaginar el pequeño tamaño que tienen todos estos ejemplos de mesofauna que estamos presentándote.

Al ser excavadores, son importantes ingenieros del suelo, ayudando a airear y a crear porosidad. A su paso liberan una secreción llamada drilosfera que ayuda a regular las comunidades bacterianas y los porcentajes de minerales en el suelo.

Los ácaros son arácnidos de tamaño microscópico, de colores que van del crema al café acordes a su entorno. Se alimentan de materia orgánica y ayudan a procesarla para formar nuevo suelo. También pueden ingerir otros invertebrados, hongos o protozoarios.

Sus desechos son el alimento principal de bacterias y hongos, que terminan con el proceso de descomposición y biodisponibilidad de elementos para ser reintroducidos en la cadena trófica. Son muy abundantes en el suelo y son importantes bioindicadores de calidad edáfica. Se calcula que en 10 hay entre 50 mil a 250 mil ácaros por metro cuadrado. Cuando hay pocos, puede deberse a deficiencias o perturbaciones ambientales.

Te contamos más sobre los Bioindicadores: qué son, tipos y ejemplos, aquí.

Estos artrópodos se caracterizan por tener al final de su cuerpo dos prolongaciones paralelas, dos antenas largas y por ser de color transparente. Son minúsculos, de unos pocos milímetros de largo, pero son muy abundantes en la mesofauna del suelo y pueden cavar galerías ayudando a la ingeniería edáfica. Su alimentación es principalmente omnívora: se alimentan de hongos y de animales pequeños que son parte de la mesofauna.

Estos artrópodos son miriápodos, lo que quiere decir que son parientes de los ciempiés. A diferencia de estos últimos, los sínfilos no son venenosos, son pequeñísimos y miden entre 0.5 a 10 milímetro. Carecen de ojos, son muy rápidos y son de color blanco.

Abundan en suelos húmedos, pero también en el musgo, en grietas, bajo rocas o entre la hojarasca. Es posible que los hayas visto también dentro de madera en pudrición en algún bosque pues se alimentan de esta materia orgánica, así como también de otros tipos de vegetación en descomposición. Pueden ser un gran problema para agricultura porque pueden atacar a tubérculos o raíces.

Conocidos popularmente como termitas, pueden encontrarse en forma de vida subterránea, aunque otras especies pueden tener otros hábitos. Las termitas que forman parte de la mesofauna son aquellas que viven entre el suelo y prefieren aquel que es muy húmedo. Ellas fabrican colonias reposicionando tierra de un sitio a otro, ayudando a la formación subterránea.

También contribuyen a la descomposición de materia orgánica alimentándose de madera, hojarasca o deshechos de otros animales. No pueden procesar la madera por sí solos y, para ayudarse, tienen en su sistema digestivo protozoario que ayudan a la descomposición de la celulosa. Estos isópteros son importantísimos descomponedores de la madera en selvas y bosques. Por otro lado, pueden ser plagas en campos de cultivo.

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