Hábitat acuático: qué es, características, tipos y ejemplos

Iniciaremos este tema con la definición de hábitat acuático. Este es cualquier espacio físico ubicado sobre la hidrosfera que es habitado por una especie en particular. Entendemos por hidrosfera a la porción de la Tierra ocupada por océanos, mares, ríos, lagos y otros tipos de masas de agua.

En cuanto a las características del hábitat acuático, la temperatura estable es fundamental para la supervivencia de la biota adaptada al agua. Esto difiere ampliamente con el hábitat terrestre, que se caracteriza por los cambios bruscos de temperatura.

Dentro de los componentes del hábitat acuático que posibilitan la vida en el agua, podemos distinguir entre:

• Componentes o factores bióticos del hábitat acuático: son todos aquellos seres vivos que interactúan con su entorno, con los individuos de su misma especie y con las demás especies que viven en un determinado espacio en el agua.
• Componentes o factores abióticos del hábitat acuático: se refiere a factores físicos, no vivos, que imponen las condiciones del hábitat, entre ellos temperatura, presión, luminosidad, turbidez, salinidad, etcétera.

Como sabrás no todos los ecosistemas acuáticos son iguales y, justamente, los hábitats existentes en ecosistemas marinos difieren ampliamente en sus características, con respecto a los hábitats de ecosistemas de ríos, lagos y lagunas. Por ello, existen distintos tipos de hábitats acuáticos que, en este artículo en particular, los diferenciaremos en dos tipos:

Hábitats marinos

Estos hábitats incluyen océanos, mares y marismas. Las mayoría de especies que viven en estos hábitats se desarrollan prácticamente en oscuridad, debido a que la luz solo penetra hasta los 100 metros de profundidad. Además, otra característica principal el la presencia de concentraciones de sales a las cuales la biota está adaptada a vivir.

Hábitats de agua continental

Aquí se incluyen hábitats dentro de cuerpos de aguas que están alejados de mares u océanos, como ríos, lagos, lagunas y más. Según la velocidad de la corriente de agua y la cantidad sedimentos suspendidos, el agua puede ser mas o menos turbia. Precisamente la turbidez y también la profundidad, determinan la claridad y luminosidad del hábitat.

En este apartado mencionaremos distintos ejemplos de hábitat acuático. Todos ellos presentan factores bióticos y abióticos que en conjunto posibilitan el desarrollo de la biodiversidad acuática.

Ejemplos de hábitats acuáticos marinos

Los ejemplos de hábitats dentro de los ecosistemas marinos o de agua salada se diferencian entre sí por la profundidad y las características que esta determina. Entre ellos encontramos:

• Zona costera: hábitats con menor profundidad, por ello la luz penetra y permite temperatura mas cálidas. En las zonas de costa se desarrollan una gran diversidad de plantas de hábitats acuático ya que la luz es un requisito indispensable para la fotosíntesis.
• Mar abierto: hábitats con mayor profundidad que el caso anterior, por lo tanto con menor incidencia de la luz y mas fríos. Estos hábitats posibilitan el desarrollo de biodiversidad herbívora y omnívora.
• Fondo: hábitats a gran profundidad con casi nula penetración de la luz y, por ende, menores temperaturas. Con frecuencia estos hábitats son refugio de especies carnívoras y detritívoras adaptadas a la oscuridad. Te recomendamos leer estos otros artículos sobre los Fondos marinos: qué son, tipos y fotos y las Llanuras abisales: qué son y características.

Ejemplos de hábitats acuáticos de agua dulce

Con respecto a los hábitats dentro de los ecosistemas de agua dulce, podemos distinguirlos según el movimiento de sus corrientes, como:

• Lénticos: hábitats con aguas quietas o estancadas. En general, son aguas cristalinas ya que sus sedimentos han decantado con el paso del tiempo. La transparencia de sus aguas, permite el paso de la luz lo que lo hace propicios para el desarrollo de la vegetación. En este enlace verás más información sobre los Ecosistemas lénticos: qué son y ejemplos.
• Lóticos: hábitats con aguas en movimiento, que con frecuencia arrastran sedimentos. Generalmente sus aguas son turbias lo que disminuye el paso de la luz. Son el refugio de muchas especies de animales y, en zonas de menor profundidad, de especies vegetales. En este otro post podrás aprender más sobre los Ecosistemas lóticos: qué son y ejemplos.

Además, aquí abajo te dejamos varias imágenes del hábitat acuático, tanto de agua salada como de agua dulce, en el mismo orden en el que los hemos mencionado.

Tal y como mencionamos al principio, los hábitats acuáticos albergan una gran diversidad de especies. Aquí, en especial, mencionaremos algunos animales de hábitat acuático.

Animales vertebrados

Los animales vertebrados se definen por presentar una columna vertebral. Muchos vertebrados presentan una vida tanto terrestre como acuática como, por ejemplo, las aves acuáticas las cuales anidan y pasan el mayor tiempo en tierra, pero con frecuencia se sumergen en las aguas en busca de alimento. No obstante, en este apartado nos enfocaremos únicamente en los vertebrados que presentan una vida completamente acuática.

• Peces: sin dudas, cuando pensamos en hábitats acuáticos lo primero que se nos viene a la mente son los peces. Ellos respiran a través de las branquias, por lo que no necesitan salir a la superficie para tomar aire.
• Reptiles acuáticos: se caracterizan por presentar sistema respiratorio pulmonar. A diferencia de los peces, deben salir a la superficie a respirar. Entre ellos podemos mencionar tortugas marinas y de agua dulce y serpientes, también marinas y de aguas dulces, así como cocodrilos, que también los hay de agua dulce y salada.
• Mamíferos acuáticos: al igual que los reptiles presentan sistema respiratorio pulmonar, por lo que deben salir a la superficie para respirar. Por ser mamíferos, presentan mamas con las que alimentan a sus crías. Como ejemplos podemos nombrar a ballenas, belugas, delfines, manatíes y más.

Animales invertebrados

En contraposición a los vertebrados, los invertebrados no presentan una columna vertebral. Este grupo es megadiverso y muchos de ellos son de hábitos acuáticos como moluscos (como los caracoles o los pulpos), crustáceos (como los cangrejos), equinodermos (entre ellos la estrella de mar y el erizo), poríferos (como las esponjas marinas) y muchos más.

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